Basados, por un lado, en las psicosis experimentales por sustancias como la Psilocibina y la Mezcalina, y por otro, en su semejanza estructural con neurotransmisores como la Dopamina y la Noradrenalina, se postuló la posibilidad de la producción “endógena” de sustancias psicodislépticas. La adición de grupos metilo a este neurotransmisor les conferiría la capacidad de inducir síntomas psicóticos en individuos predispuestos. De ahí que se postule en las psicosis endógenas una alteración en las reacciones de transmetilación, muy extendidas en todo el organismo. Basándose en esto fue posible aislar en orina de pacientes varios compuestos entre los que se destacan: la Dimetoxi Fenil Etil Amina, derivado metilado de la Dopamina; la Bufotenina y la O-Metil Bufotenina, ambos productos de la metilación de la serotonina, y un derivado metilado de la Triptamina, la NN-Dimetiltriptamina (DMT) . Todos ellos han sido extensamente investigados, particularmente por el grupo de Ciprian-Ollivier en los últimos años y, sobre todo en el caso de los Indoles Metilados se encuentra una correlación entre los niveles de excreción urinaria de estos compuestos y la sintomatología psicótica, particularmente la de tipo disperceptual.
Otros estudios más recientes realizados entre 1980 y 1995 comprobaron que la presencia de estos compuestos en orina no son un marcador biológico de la esquizofrenia o las psicosis pero si que son de inestimable valor respecto de aquellos fenómenos vinculados a la sensopercepción.
Resulta interesante señalar que estos compuestos son los que podemos encontrar en algunas plantas utilizadas por los chamanes para ingresar al ” mundo de los sueños o mundo de los espíritus “, en especial una de ellas, la DMT es descripta por el investigador Terence Mckenna como una de las más poderosas para provocar estados no ordinarios de conciencia.
Informes sobre la psicoactividad de las triptaminas metiladas empezaron a ser publicados a mediados de la década de los cincuenta.En los sesenta aumentó considerablemente el interés por la identificación y cuantificación de las triptaminas endógenas después que varios estudios determinaron la producción endógena de dichas sustancias lo que fortaleció la hipótesis de alguna vincunlación con las psicosis.La administración de DMT, bufotanina y algunos derivados de la trasmetilación de estas como la 5-MeODMT ,provocan fenómenos visuales y esta última específicamente centra su actividad psicoactiva básicamente de imaginería emotiva, más que visual, con estados mentales parecidos alas experiencias de casi muerte (ECM ). La DMT y la 5-MeODMT administradas en forma endovenosa son capaces de penetrar la barrera sanguínea del cerebro y producir los efectos antes mencionados, no sucede lo mismo con la bufotenina, que si bien no penetra al ser administrada en forma exógena al cerebro puede tener actividad si se forma cerca de su lugar de acción en el Sistema nervioso central, inclusive se especula con la posibilidad de que cualquier efecto psicoactivo de la misma administrada por vía endovenosa tenga que ver con su conversión in vivo a 5-MeODMT.
En algunos brebajes alucinógenos como la ayahuasca encontrarmos principalmente sustancias como la DMT como principal producto psicoactivo capaz de provocar experiencias trascendentes, e inclusive reconocer al muerte como parte de la vida y recrear experiencias de muerte -renacimiento con una total transformación del individuo.En la preparación de estos brebajes no solo encontramos triptaminas metiladas como la DMT sino otro tipo de sustancias como las Beta-carbolinas que potencian la acción de las triptaminas metiladas. Lo interesante de esto es que este mecanismo entre diversos principios psicoactivos hallados en la ayahuasca aparentemente sería el mismo que se produce cuando dormimos, es decir estaríamos en presencia de un juego entre indoles endógenos no muy distinto al descripto anteriormente, que sería necesario para producir el fenómeno visual de los sueños.
Según esta hipótesis, los niveles de Beta carbolinas endógenas aumentan durante el sueño y facilitan la actividad de las triptaminas metiladas al bloquear su metabolismo. Las actividades de las triptaminas por lo tanto fomentan los componentes emotivos y visuales de los sueños.Otras evidencias sugieren que áreas del cerebro vinculadas con la actividad de los sueños son ricas en receptores para este tipo de sustancias.
Como vimos estas sustancias son comunes a los principios psicoactivos de algunas plantas alucinógenas, a los hallados en pacientes con alteraciones en la sensopercepción y cumplen un rol fundamental en la producción de las imágenes visuales y los contenidos emocionales de los sueños. Claro que lo que para la psiquiatría clásica resultan trastornos de la sensopercepción, en otro contexto presentan puertas de acceso a otros mundos, de hecho en las psicosis los trastornos de la sesopercepción constituyen uno de los componentes de la enfermedad, pero no es lo único que determina la patología, como hemos visto hay un deterioro generalizado de la vida psíquica y de relación del individuo.
Ahora bien, ¿ pero cuál es la relación de esto que vimos con el tema de las abducciones? Tanto en las psicosis, como en los estados visionarios, como en los sueños, como en las abducciones lo que está alterado es justamente la sensopercepción. Cuando hacemos referencia a sensopercepción de alguna manera estamos hablando de como nuestros sentidos perciben el mundo que nos rodea y como podemos orientarnos en un espacio y en un tiempo.Al decir orientación en el espacio debemos considerar que el espacio en el que nosotros vivimos es lo que a veces se denomina espacio orientado, es el espacio geométrico que tiene una. superficie horizontal, un eje vertical, donde hay arriba, abajo, cerca, lejos, derecha, izquierda, hay fronteras, hay límites. Las fronteras pueden ser la pared de enfrente quo no tiene ventanas o la oscuridad tenaz y silenciosa de la noche o hasta la comba azul del cielo que es una forma de limitar no nuestro horizonte pero si nuestro espacio. Todos nosotros tenemos esa sensación de que el cielo es una cúpula concreta y material solamente de día, porque de noche uno tiene conciencia de que él universo es infinito y que lo contempla a uno con indiferencia.
Junto a ese espacio orientado en el que podemos decir que estamos en esto momento aquí, en este lugar, ubicado en tal calle y en tal ciudad, existe lo que se llama espacio sintónico; es la experiencia determinada por el tono de nuestros propios sentimientos, por nuestro estado de ánimo, pero hay que hacer una pequeña diferencia: no se trata de una modalidad sensorial que a veces nos sucede, sino que se trata de un continuo estado físico que nos rodea cuando decimos por ej.: que la tristeza está encogiendo el espacio; que la felicidad lo dilata, que los objetos cuando nos sentimos felices nos parecen mas grandes.
En las enfermedades del cerebro lo que está especialmente distorsionado es el espacio orientado: el paciente no sabe donde está, tampoco sabe su tiempo. Sin embargo, en el mundo azorado del esquizofrénico; en el torbellino de una manía o en la fatalidad de una depresión, o cuando se ingiere mezcalina, mariguana, LSD 25, DMT, las cosas son muy distintas, el sabe donde está, no hay alteración del espacio orientado pero si del espacio sintónico. Existe una cosa extraña en nuestro mundo, nada cambia, no hay nada que pueda decir que es una apreciación engañosa. Los objetos son esos los que están allí, en su tamaño, en su color, pero, sin embargo, algo extraño sucede: los colores son deslumbrantes; al s
ujeto le parece percibir que la fisonomía de un individuo dice mucho mas de lo que esta expresando, hay una profunda capacidad de envolverse emocionalmente con el otro, es una condición psiquiátrica que fue descripta como “el extrañamiento del mundo percibido “, tampoco no hay ningún cambio en los efectos puramente sensoriales del mundo, sin embargo, el enfermo se ve conmovido por el carácter espectral y contradictorio de sus percepciones.
Al decir orientación en el tiempo debemos analizar lo que ocurre durante el sueño. El sueño consiste en imágenes visuales, salvo el caso del ciego de nacimiento, el ciego no sueña con imágenes visuales sino con ruidos, con sonidos, salvo naturalmente, de que la ceguera haya comenzado después de un año, según calculan algunos, entonces si pueden soñar con imágenes visuales. Cuando el individuo duerme y sueña esas imágenes visuales se reflejan en un movimiento rápido de la musculatura extrínseca del ojo; el electroencefalograma muestra un trazado rápido que indica que el sujeto está soñando, lo único que gráfica es acerca de la profundidad de las disoluciones de conciencia. Dijo Freud que el sueño era una psicosis con todos los absurdos y a1ucinaciones propias de ella, efectivamente, cuando la conciencia se disuelve cada noche se libera el mecanismo del sueño y es notable como todos nosotros a la mañana podemos empalmar con el estado de vigilia que teníamos la noche anterior, porque el mundo de vigilia es un mundo continuo pero ninguno de nosotros puede retomar el hilo del sueño en el mismo momento en que dejó de soñar a la noche. El mundo del sueño es discontinuo.
Entramos aquí en el tiempo cronológico, el tiempo medido, quizás se sueña cuatro o cinco períodos todas las noches, de 10 a 15 minutos cada uno; pero especialmente se sueña cuando el sueño es más ligero, cuando se está próximo a despertar y no durante las primeras horas en que este es más profundo. Este tiempo en que pueden medirse las oscilaciones rápidas de la musculatura ocular (10 ó 15 minutos-cuatro o cinco veces por noche) se denomina espacio de sueños pero así como distinguimos entre espacio orientado y espacio sintónico también vamos a distinguir entre tiempo de sueño y tiempo autístico.
Tiempo autístico es el tiempo del sujeto que sueña sintiendo que pasan muchas horas, que su sueño se hace tremendamente prolongado ya sea penoso o placentero (pero en realidad cronológicamente hablando soñamos en término del tiempo de sueño). Específicamente tanto en las abducciones como en los estados visionarios está alterado el espacio sintónico y el sujeto vive en un tiempo discontinuo y autístico. Casi todas las descripciones de abducciones hacen referencia a un estado muy particular donde el sujeto vivencia su experiencia, algunos lo describen como más real que la realidad o con los colores más vívidos y donde uno puede sentirse en sintonía con los seres que lo rodean.
Veamos una descripción del estudioso Terence Mackenna cuando toma por primera vez contacto con DMT.
” Mi primera experiencia con DMT data de 1965. Aún entonces era un compuesto inusual. Muy poca gente se familiarizó con él porque vivimos en una sociedad completamente obsesionada con toda clase de sensación imaginable y adoradora de toda clase de terapia, de cada intoxicación y ,cada combinación sexual imaginable y de todo tipo de abuso de la prensa y otros medios. Pero aunque podamos ser muy hedonistas o perseguidores de lo raro podemos encontrar que la DMT es demasiado. En español se suele decir bastante y muchos bastante llevan a demasiado. Cuando se fuma, el comienzo de la experiencia aparece en unos quince segundos. Inmediatamente se cae en trance. Uno cierra los ojos y oye un sonido como si se desgarrara celofán, como si alguien arrugara una lámina de plástico y la lanzara lejos.
Un amigo mío sugería que se trataba de nuestra entelequia radial arrancándose de la matriz orgánica. Se oye un ruido ascendente. También está presente la cualidad alucinatoria, la movilidad cambiante de las figuras geométricas que varían de colores. En el lugar de la actividad sináptica, todas; ligaduras están siendo ocupadas y uno experimenta la modalidad del cambio (shift) durante unos treinta segundos.
En tal momento se llega a un lugar indescriptible, un espacio que se siente como subterráneo, de alguna manera aislado y con forma de cúpula. En Finnegans Wake ese espacio recibe el nombre de “merry go raum” (la palabra raum es espacio en alemán, y merry go round es la expresión inglesa que traducimos como calesita). E1 lugar está, de hecho, girando y en ese espacio uno se siente como un niño, aunque uno ha llegado a algún lugar en la eternidad.
La experiencia me recuerda siempre el segmento veinticuatro de Heráclito: “E1 infinito es un nino que juega con globos de colores”. Uno llega a ser no sólo el infinito que juega con los globos de colores sino que también se reúne con las entidades. En el libro que escribimos conjuntamente con mi hermano, The Invisible Landscape (E1 paisaje invisible), yo los describo como enanos-máquina autotransformadores. Son entidades que se contorsionan dinámicamente en módulos topológicos distinguiéndose del fondo que los rodea, el cual a su vez está en transformación continua. Son entidades que me recuerdan a los Munchkins de la película “E1 mago de Oz” cuando aparecen portando el certificado de la muerte de la Bruja del Este y cantan con una voz aguda un versito sobre “estar absoluta y completamente muerta”. Cuando llegan los Munchkins de la triptamina, estas sobredimensionales entidades, estos enanos-máquina nos inundan de amor. No erótico, sino colmado de una cordialidad que hace sentir bien. Son como fragmentos reflejos de una parte de la propia psique previamente escondidos y súbitamente autónomos.
Y ellos hablan y nos dicen: “No te sientas alarmado. Recuerda y haz lo que hacemos nosotros”. Una de las interesantes características del DMT es que a veces nos inspira miedo-esto marca la experiencia como existencialmente auténtica-. Una de las formas de evaluar un compuesto es observar cuánto desea el sujeto de la experiencia someterse a la segunda prueba. Un toque de terror confiere validez a la experiencia porque significa “Esto es real”. Somos equilibrados, leemos las publicaciones, conocemos las dosis máximas, la dosis letal-50 y todo lo demás. Pero a pesar de eso es tan grande la fe que uno tiene en la mente que cuando uno está bajo el efecto siente que las reglas de la farmacología no se aplican y que el control de la existencia en ese plano es realmente un problema de enfoque de la voluntad y buena suerte. No quiero decir que haya algo intrínsecamente bueno en el terror. Digo que, dada la situación, si uno no se aterroriza es porque está un poco fuera de contacto con la dinámica total de lo que pasa. No sentirse aterrorizado significa que uno es un loco o que ha tomado un compuesto que paraliza la habilidad de estar aterrorizado. No tengo nada contra el hedonismo y ciertamente yo saco algo de ello. Pero la experiencia debe movernos el corazón y sólo moverá el corazón si trata con la realidad de la vida y la muerte. Si se trata de vida y muerte nos moverá a sentir miedo, a llorar y a reír. Estos son lugares profundamente extraños y ajenos.
Los enanos fragmentarios parecen confortantes cuando dicen: “No te preocupes, no te preocupes, haz esto, mira esto”. Mientras tanto uno está más allá. E1 propio yo está intacto, los propios reflejos del miedo, intactos. Uno no está desintegrado. En consecuencia, la reacción es el asombro persistente. Se respira y sigue persistiendo. Los enanos dicen: “No te estanques en la sorpresa de modo que se tapone tu habilidad para comprender. Trata de no estar tan asombrado. Trata de enfocar y mirar lo que haces”. Lo que ellos están haciendo es emitir sonidos musicales similares a lenguaje. Son sonidos que pasan sin un momento cuantificado de distinción-como dijo Filon que haría el Logos cuando llegara a ser perfecto-de las cosas escuchadas a las cosas contempladas. Uno escucha y nota un lenguaje de significado extraño que está transfiriendo información extraña que no puede ser vertida a la lengua que nos es propia.
Como monos que somos, cuando encontramos un objeto translingüistico se activa una especie de disonancia cognitiva en nuestro cerebro hendido. Tratamos de verter lenguaje sobre el objeto, que se desliza como el agua en las plumas del pato. Tratamos de nuevo y fallamos otra vez y esta disonancia cognitiva, esta excitación temblorosa que sigue saliendo del objeto nos asombra y llena de admiración y nos coloca al borde del terror. Uno tiene que controlar el terror y para eso hay que hacer lo que hacen las entidades, lo que nos decían que hiciéramos “.
La descripción de Mckenna se aproxima bastante a lo descripto en las experiencias de abducción, lógicamente en otro contexto, un lugar con forma de cúpula, sentimientos de terror, entidades como enanos, etc; es como si bajo ciertas circunstancias que provocan un estado no ordinario de conciencia uno podría tener acceso a un ” lugar ” o un ” espacio ” por ponerle algún nombre en donde se desarrollarían este tipo de experiencias.Tanto las abducciones como las iniciaciones chamánicas, como los estados visionarios se producen en un ” sitio ” especial,es un lugar que cabalga entre los sueños y la realidad, el hogar de los mitos y la fantasía, un lugar que juega con leyes propias y al que nos animariamos a definir como espacio-tiempo psicoide.
Jung definió a la sincronicidad como un principio de conexión acausal. Las sincronicidades son las significativas coincidencias que existen entre el mundo de lo psíquico y la realidad material, el claro ejemplo de estar hablando de una persona o pensando en ella y que de pronto aparezca. Las sincronicidades serían según el mismo Jung fenómenos de naturaleza ” Psicoide ” , al igual que los arquetipos ,según lo cuál no pertenecen ni al reino de la psiquis ni al reino de la realidad material ; existen en una zona crepuscular entre la conciencia y la materia. Un chamán raramuri, Don Mauricio en la Sierra Tarahumara nos decía allá por 1990 que las entidades que le enseñaban a él que tenían sus pacientes se le aparecían en un estado que ” no era el estar soñando pero tampoco el estar despierto, era algo intermedio ” ; en algunos casos el solo veía, en otros al igual que otros chamanes era llevado a ese lugar, al reino de los espíritus. Los fenómenos psicoideos son más frecuentes de lo que pensamos, influyen en la realidad física pero no son físicos, son de naturaleza dual, un claro ejemplo de ello son las emociones, que vivimos todos los días, sabemos que producen neuropéptidos que van a influir sobre determinados órganos y sistemas, lo que sería el sustrato físico pero como se estudia el dolor, la tristeza o la alegría , son emociones, ¿ pero que son en realidad ?
Cuando hablamos de espacio-tiempo psicoideo nos referimos a un lugar, por denominarlo de alguna manera , que sería el escenario en donde se producen los fenómenos de abducción, las iniciaciones chamanicas, los ritos de pasaje, un lugar donde moran los mitos, al que se puede acceder en determinados estados particulares de conciencia y con el que se puede interactuar.Este es el lugar en donde reina el tiempo mítico, el tiempo sagrado ,la era del sueño en donde los dioses crearon el mundo y las cosas, a este lugar se accede por los rituales que no hacen más que recrear los acontecimientos primigenios. Mircea Eliade dice refiriéndose al tiempo mítico.
” El tiempo mítico de los orígenes es un tiempo fuerte porque ha sido transfigurado por la presencia activa, creadora de los seres sobrenaturales. Al recitar los mitos se reintegra este tiempo fabuloso y, por consiguiente, se hace uno de alguna manera contemporáneo de los acontecimientos evocados, se comparte la presencia de los Dioses o de los Héroes. En una fórmula sumaria, se podría decir que al vivir los mitos se sale del tiempo profano, cronológico y se desemboca en un tiempo cualitativamente diferente, un tiempo sagrado, a la vez primordial e indefinidamente recuperable. Los mitos describen las diversas, y a veces dramáticas, irrupciones de lo sagrado ( o sobrenatural ) en el Mundo “
Si nos atenemos a la idea de que el “mito” es algo verdaderamente “VIVO” y que esta constantemente produciendo significación, deberemos interpretar también el porque eran utilizados y por que continúan haciendolo, es el que mismo siempre tuvo como base fundamental una FUNCIÓN, si hablamos de función, esto nos lleva a otra palabra que es FUNCIONAR, es que realmente el mito FUNCIONABA, daba resultado, cuando un cazador en una tribu relataba el mito de origen de los primeros cazadores o el mito de origen de una de sus presas para él conocer profundamente la esencia de lo cazado y su cazador, se conectaba con el mito, danzaba imitando los movimientos de la presa y luego ensayaba sus propios movimientos de cazador, luego el éxtasis de la danza sabia que su empresa funcionaria que tendría éxito en la misma, lo que los Antropólogo e investigadores nunca nos dijeron fue que “las cacerías así realizadas eran realmente exitosas”, al igual que recitar el mito del nacimiento del arroz en Tibor cuando un arrozal no medra, o la danza de la lluvia, de esta manera aquello que había sido primero pensado era ahora mediatizado en la realidad consensual, el “mito” era una fuerza ACTIVA, y movilizadora, capas de ‘EXPLICITAR” aquello que solo era parte de la MENTE, entendida esta como un gigantesco reservorio de información y que tiene como referente al hombre en lo que denominamos realidad ordinaria.
Anteriormente hablábamos de como la realidad era manipulada en la dupla conciencia -realidad, ahora podemos decir que es el MITO el VEHÍCULO para tal fin.Pero para que el mito introduzca sus explicitaciones en la realidad consensual era menester atravesar EL RITUAL.Ciertamente este es uno de los factores que hemos abandonado, el del RITUAL y el de lo SAGRADO, quizá sea por ello que el mito regresa en nuestros días con tal fuerza que se explicita de forma aparentemente individual, aun que sea la explicitación de un contenido colectivo. El mito es el verdadero vehículo de lo que el denominamos fuerza RE-ESTRUCTURADORA que se expresa tanto en el ámbito consciente como colectivo de la conciencia, el “mito” no es otra cosa que el PUENTE entre lo ordinario y lo “extra”-ordinario, lo que esta mas allá, lo que toca la OTREDAD, tal cual lo definiera Octavio Paz, y lo REAL.
El mito aun funciona, no solo en lo referente a lo extraterrestre, también continua funcionado en Fátima, en Lourdes, en San Nicolás, en Uritorko, en Shasta, en las sierras Negras, en el cañón de Chelly, en cerros Colorados y en cuanto lugar haya alguna vez tenido su expresión explicita, y lo mas importante de todo es que como antaño aun FUNCIONA opera resultados, demuestra su actividad inmanente, se nos presenta desgarrando la razón como algo vivo, el mito es en si una cuestión de experiencia, no de intelecto, este ultimo es solo la puerta del entendimiento, la experiencia de lo mítico es la llave de la misma.. De alguna manera cuando se accede a este lugar se influencia la realidad ordinaria y esto en nada difiere en lo que sucede en la abducciones, los testigos acceden a un lugar que se rige con las mismas leyes que se rigen los chamánes en sus mitos o iniciaciones, un lugar como decíamos al comienzo que cabalga entre el sueño y la realidad un lugar al que denominaremos espacio-tiempo PSICOIDEO y que es en donde se produce la experiencia.
Ahora bien, hemos visto que ciertas sustancias endógenas son halladas en la orina de pacientes con alteraciones de la sensopercepción, también hemos
visto que ingiriendo algunas de estas substancias, denominadas drogas psicodélicas se altera la sensopercepción, por otro lado la mayoría está emparentada con estos metabolitos endógenos, también hemos visto que en las abducciones está alterada la sensopercepción y se sabe, además, que existen ciertas condiciones como para poder acceder a la experiencia tal lo descubierto por Kennet Ring y explicitado en su libro el Proyecto Omega, siguiendo con este tipo de razonamiento es posible que haciendo un análisis de la orina de los abducidos podamos encontrar algunas de estas substancias, lo que nos colocaría frente al substrato biológico de la abducción y de ser correcta esta hipótesis estaríamos frente a una herramienta de fundamental importancia para la validación de tales casos y por otro lado estaríamos demostrando que si bien aparentemente el sujeto interactua con algo, llámese lugar u otra cosa en la génesis de la experiencia es de fundamental importancia la predisposición que pueda o no tener el sujeto, alejándonos cada vez más esta posibilidad de la idea de ET cabezones y grises que andan pululando por los cielos del planeta secuestrando gente.
En lo que a nosotros respecta a la fecha estamos ensayando una batería de test y análisis en los casos reportados a fin de poder comprobar o refutar dicha hipótesis, por cierto que consideramos sumamente importante que los investigadores enfrascados en estos estudios puedan tener a bien considerar estas ideas para ver si podemos entre todos hallar esto que sería el substrato biológico de una abducción, de allí que instamos a repetir estos estudios u otros. Las substancias buscadas por ahora se reducen a: DMPEA (3,4 dimetoxi-fenil-etil-amina), DMT ( N, N-dimetiltrptamina) bufotenina ( 5- hidroxi-N, N-dimetiltriptamina ), y 5-MeODMT ( 5-metoxi-N, N-dimetiltriptamina )
Estas sustancias son las mismas que la psiquiatría biologista se encarga de buscar como indicadoras de psicosis, pero como hemos visto antes en realidad no indican una patología sino alteraciones en la sensopercepción que es lo que nos interesa, por otro lado son sustancias psicomiméticas que pueden hallarse normalmente en la orina pero en cantidades ínfimas.Siguiendo con esta línea de razonamiento es posible que hallemos en sujetos abducidos cantidades elevadas de alfa-2 globulina una sustancia encargada de controlar la concentración de Triptófano, un aminoácido de cuya metabolización se obtiene DMT.
Quizá el mayor problema de estos estudios radique en que resultaría probable que estas sustancias se encuentren elevadas únicamente en el momento de la abducción lo cuál obviamente dificulta su hallazgo. No obstante consideramos válido realizar más estudios en esta línea de trabajo porque es posible que nos encontremos con varias sorpresas.